Brandon y Valentina se conocían incluso antes de conocerse oficialmente. Desde 2019, orbitan en círculos sociales similares. En 2021, Valentina y Brandon se convirtieron en compañeros de trabajo. Se conocieron oficialmente en un retiro de la compañía para la que trabajaban. Fue la primera vez que los empleados se vieron después de la pandemia. Este tiempo les dio a Brandon y Valentina la oportunidad de entablar una amistad. A lo largo de los meses, se apoyaron mutuamente en los proyectos de trabajo importantes y en momentos significativos de cada una de sus vidas.

 

En la primavera del 2022, Valentina le comentó a Brandon con inequívoca convicción que le gustaba y mucho, y ella tenía curiosidad de saber qué pensaba él al respecto. Brandon, a su vez, sólo se atrevió a decirle a Valentina «lo sé». Después de años de este valiente episodio, Brandon ha confirmado que él quiso decir «Lo sé Valentina... yo también».

 

Saliendonos un poco de la historia, llegaremos al verano de 2022. Valentina y Brandon empezaron a salir más. Dieron largas caminatas por la ciudad, disfrutaron de viajes a la playa, dieron interminables paseos en bicicleta, comieron una cantidad cuestionable de sándwiches y manejaron por Massachusetts escuchando la música favorita del otro. Estos momentos juntos les ayudaron a descubrir lo mucho que tenían en común y lo mucho que les gustaba la compañía del otro...

 

Sus momentos favoritos los pasaron en Fenway Park, ya que Brandon y Valentina se enamoraron de verdad viendo juegos de  los Medias Rojas. Ambos disfrutaban el béisbol antes de conocerse. Para Valentina, era una conexión con su papá y su país natal; para Brandon, era un deporte que siempre le había  gustado ver con amigos y familiares, especialmente en Boston. Desde que se conocieron, han compartido al menos 30 partidos juntos. 

 

Formalizaron su compromiso mutuo decidiendo irse a vivir juntos. Fue un reto, pero probablemente fue una de las mejores decisiones que han tomado. Ahora, dos años después, tienen una casa en la que han compartido recuerdos con amigos y familia y, por supuesto, con Dino, que le robó el corazón a Brandon desde el primer día, a pesar de que no le gustaban los perros. 

Brandon y Valentina están entusiasmados con el próximo capítulo de sus vidas como esposos y están deseando seguir creciendo como mejores amigos.

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Con cariño,